Los visitantes se quedan asombrados al ver las tallas en madera realizadas por verdaderos artistas. Foto: Emilio Gandarilla Avilés / OEM-Informex
Organización Editorial Mexicana
9 de enero de 2011
Por los Rincones de México
La población de Tepoztlán, en el Estado de Morelos, además de tener varios atractivos para los turistas como es la pirámide en el Cerro del Tepozteco, el templo y convento construidos por los dominicos en 1565, dedicados a la natividad de la Virgen María, tiene un atractivo especial que es parte del encantamiento o magia que posee este pueblo.
Tepoztlán fue fundado por los tlahuicas, en un valle rodeado de vario altos cerros a los que se les atribuyen efectos mágicos; ahí nació Tepozcatl, hijo de madre sin haber sido tocada por hombre, hecho al que se le atribuyó un mandato divino, para distinguir a este ser como destinado a ser guía del pueblo.
En su juventud y niñez Tepozcatl fue perseguido por quienes querían destruirlo, para que no alcanzara la mayoría de edad, cuando niño lo arrojaron a una cascada para eliminarlo, fue salvado por dos ancianos que ayudados por los animales del bosque lo cuidaron, en su oportunidad se presentó ante su pueblo, fue recibido con los honores de un dios, se distinguía por su astucia para preservar a Tepoztlán de sus enemigos e inventó muchos instrumentos para los trabajos del campo, se hizo en su honor un templo en el Cerro Tepozteco y se le convirtió en el dios de la bebida sagrada: el pulque.
Existen muchas leyendas de hechos sobrenaturales que, según dicen, han acontecido en esta población, como es la visita de seres extraterrestres en naves espaciales, también se comenta que en este lugar las enfermedades graves encuentran alivio y pueden recobrar la salud los enfermos.
Referimos estos hechos para encontrar alguna justificación a las grandes cantidades de personas que cada fin de semana visitan la población, llega la presencia de turistas a tal grado que todos los patios de las casas se convierten en estacionamientos, para que queden libres del trásito vehicular las calles y los visitantes puedan transitar por la población sin peligro.
En una de las calles principales se organiza un tianguis los domingos, donde se puede adquirir una gran cantidad de artesanías, no solamente hechas en México, sino también de otras partes del mundo.
Es muy interesante ver cómo se saturan las calles con las tienditas improvisadas y la gran cantidad de gente que va llegando, al transitar libremente por la mitad de las avenidas.
Se pueden adquirir vestidos de dama hechos en la India, cristales de adorno para los hogares fabricados en europa, verdaderas obras de arte en pinturas y esculturas así como los famosas escenas cromáticas elaboradas en papel amate.
Existen varias casas donde se dan consultas para predecir el futuro de las personas utilizando todas las técnicas sobre la adivinación. Viendo cuánta gente concurre a las consultas de los adivinadores y agoreros y a recorrer el pueblo, vale preguntar: ¿será esto parte de la magia que flota en el ambiente de Tepoztlán?
Se llega a esta población, tomando la carretera México-Cuernavaca, después de pasar la curva de La Pera, seguir por la desviación a Cuautla, al cruzar la primera caseta de cobro se encuentra la desviación para arribar al centro de este pueblo mágico.
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